La brisa del mar y los inigualables paisajes de Mar del Plata invitan a realizar actividades deportivas al aire libre y eso hace que muchos de sus rincones se transformen en excelentes gimnasios a cielo abierto.
En todo momento del día y en cualquier época del año, una de las habituales postales de la costa es la de cientos de personas que la eligen para hacer recorridos en bicicleta, largas caminatas con vista al mar, running o una salida en rollers.
También se puede cambiar mar por sierra por un rato y poner en marcha la idea de hacer trekking o senderismo para recorrer los bosques que bordean la Laguna de los Padres o subir por senderos en la zona serrana, disfrutando de la vista desde la altura de los campos sembrados.