Sequedad:
aparece cuando la piel carece de humedad. Es un factor principal en el marco de la dermatología, ya que las personas con piel seca tienen 3 veces más de probabilidades de tener piel sensible.
Irritación:
disfunción neuro sensorial. Entre las sensaciones molestas que genera en la piel se encuentra el ardor, picazón y enrojecimiento.
Aspereza:
aparece con regularidad en las pieles con tendencia a la descamación, con textura opaca y también despareja.
Tirantez:
consecuencia de la pérdida de hidratación y la incapacidad de retener la humectación.
#ElDatoParaTi:
el 98% de las personas con piel sensible se siente identificada con este síntoma.
Barrera cutánea debilitada:
el debilitamiento de la capa superficial facilita que los agentes irritantes atraviesen la piel y se escape la humectación.